Llenando el vacío con comida

Frecuentemente, la sociedad convive con la idea de que el cuerpo delgado es el cuerpo atractivo o sexy. De esta manera, las personas se esfuerzan mucho por adaptarse a este estándar de belleza dictado por la mayoría influyente. El deseo de perder peso es una queja de la mayoría de las personas, especialmente de las mujeres, incluso aquellas que no están “fuera de los estándares estéticos”. La preocupación por el cuerpo y la apariencia es cada vez más exagerada, pasando de cuidarse a sí mismos (as) a convertirse en un hábito perjudicial para la salud.

La vergüenza es otro factor que interfiere directamente en aquellas personas que establecen una relación nada saludable con la comida. A menudo, la persona prefiere pensar que no tiene ningún trastorno alimentario, sino que es perezosa o glotona, prefiriendo aceptar, así, que siempre estará por encima del peso. Esto muestra cuán duras son estas personas consigo mismas, usando a menudo palabras muy críticas o punitivas para describirse. El hecho es que es muy difícil para ellas admitir que tienen un problema y que necesitan ayuda. En lugar de eso, pasan la mayor parte del tiempo criticándose a sí mismas y, como resultado, comen más y más.

Cuando las personas piensan en trastornos alimentarios, comúnmente se presupone que se trata de anorexia o bulimia. Sin embargo, la cantidad de personas que sufren de compulsión alimentaria temporal o permanente ha aumentado de manera alarmante. Una de las experiencias humanas más dolorosas es el sentimiento de vacío interior. Un sentimiento de que nada tiene sentido, nada tiene razón de ser, nada ni nadie existe por un propósito. Este “agujero interior” a menudo es motivo de queja de hombres y mujeres que se esfuerzan por liberarse de algún vicio, ya sea drogas, alcohol, juego e incluso azúcar o comida. La mayoría de las veces, la persona no puede identificar desde cuándo siente este vacío, pero puede darse cuenta de que ha estado sintiéndose así durante muchos y muchos años.

La relación conflictiva con la comida a menudo surge para llenar este ‘agujero’, este vacío interior. Se utiliza como una forma de consuelo, para suprimir sentimientos y emociones que parecen sofocar a la persona en ese momento específico. Puede ser que la persona esté lidiando con una gran pérdida en su vida, por ejemplo, atravesando un proceso de duelo, divorcio, pérdida del trabajo ideal, etc. También puede ser que la persona esté pasando por un momento de inmenso estrés en el trabajo o problemas familiares. A menudo, esta persona está experimentando un momento de tensión en sus relaciones sociales, lo que la hace sentirse aislada y sola. Y es en este momento cuando la comida se convierte en la mejor compañía, la amiga que consuela, apoya y alivia el dolor.

La comida se convierte en un alivio, un remedio para el dolor interior. Ya sea en la bulimia, anorexia, compulsión u otros casos de trastornos alimentarios, la comida se utiliza como una forma de lidiar con las emociones y los problemas de la vida. Lo preocupante es que la mayoría de las veces este es un proceso inconsciente y la persona no se da cuenta de que solo está causando un problema mucho más grave para sí misma. Un trastorno alimentario puede ser considerado como el mejor amigo o como el peor enemigo de una persona. Puede ser que la persona haya utilizado la comida durante años como mejor compañía en momentos de estrés, ira, ansiedad o tristeza. A menudo, de forma inconsciente, la persona se critica y se menosprecia para así recurrir nuevamente a la comida como alivio. Para aquellas personas que nunca han sufrido trastornos alimentarios, esto puede no tener sentido, pero para aquellas que conviven con ellos diariamente, este es el único patrón de repetición que conocen. Y despedirse de un amigo tan fiel, tan compañero de tantos años, puede ser aterrador.

La terapia ayuda a la persona a desarrollar una “voz saludable”. Esto significa que en lugar de escuchar la voz del trastorno alimentario que le ordena comer o no comer, que dice que no tiene valor ni importancia, la persona comienza a escuchar la voz saludable que le dice que vale mucho y merece mucho en la vida. El terapeuta ayuda a la persona a desarrollar nuevas estrategias de enfrentamiento psicológico para lidiar con su ansiedad, estrés, ira y tristeza. Se anima a la persona a buscar el reconocimiento de su valor como individuo para que exista una ganancia emocional capaz de llenar el vacío antes ilusoriamente llenado siempre con comida.

                                                                                                                                             Thais Clemente 

4 comentários em “Llenando el vacío con comida

  1. Cybele Curi Responder

    Excelente matéria! Muitos de nós, acredito eu, se enquadra neste ciclo vicioso e o auxílio e acompanhamento de um profissional é fundamental, como descrito acima, para não nos deixar ser dominados. Parabéns Dra Thais Clemente! Acho fantástico os temas que aborda. Aguardando ansiosamente pela próxima matéria.
    Cybele Curi.

    • thais Autor do artigoResponder

      Muito obrigada Cybele. Fique de olho e conte comigo para esclarecer qualquer dúvida que tenha.

  2. Flora Araujo Responder

    Muito interessante!
    Tenho efeito contrário, sempre deixo de comer quando me sinto com este vazio.

    • thais Autor do artigoResponder

      Muitas pessoas são como você também Flora. Em ambas as situações há um prejuízo da saúde física em decorrência de uma insalubridade emocional. O importante é ter consciência desse processo e procurar uma ajuda profissional. Até porque esse vazio muitas vezes até passa por um tempo, mas acaba sempre voltando. Enquanto não se descobre e se trabalha em terapia os motivos pelos quais ele existe, ele continua ali dentro, ora adormecido, ora causando desconforto, prejudicando a saúde física do indivíduo.

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